Gabriel Miró

¿Cuántas "Obras completas" de grandes personalidades faltarán por ser editadas sin honrar realmente sus nombres? Cuando un lector, como es el que ahora escribe, se ve inmerso en el espíritu mironiano, aspira, por lo menos, a leer todas sus letras. No de golpe. No corriendo los párrafos. Sino como se lee a Miró. Es decir, saboreando cada línea tranquilamente tal y como fue plasmada sobre el papel. Y, no pudiendo reunir todos sus títulos en una estantería personal, y, sabiendo que muchas bibliotecas ya antes ardieron(y no sólo frente a Canalejas) procedo a la tarea de este artículo, que, además de un breve homenaje a su figura y obra, es la reivindicación de un derecho fundamental: el de poder leer a nuestro genuino escritor alicantino. Mas, si apenas por desgracia es hoy un escritor de culto, aquel que guste de buena literatura sabe que cuando lo lee, se percibe con la vigencia propia de todo un clásico. Y más en tiempos como el presente, donde la ecología abruma el escenario ...